Cuando vemos una grúa en un sitio de construcción, lo primero que probablemente notamos es el largo brazo que se extiende hacia el cielo, llamada pluma y es una de las características más notables e importantes de la máquina.
¿Por qué? La pluma se utiliza para mover objetos grandes en la construcción. Tiene una variedad de roles, soporta la mayor parte del peso al colocar una carga y su longitud determina el alcance máximo de una grúa. Puede parecer un dispositivo simple, pero requiere un alto nivel de precisión para operar.
Hay dos tipos diferentes de plumas de grúa: las plumas de celosía y plumas hidráulicas. Ambas tienen el mismo propósito de levantar y mover objetos y materiales, pero funcionan de diferentes maneras.
Las plumas de celosía están formadas por varias barras de acero soldadas entre sí en un patrón de “W” o “V”. Este diseño en forma de celosía aumenta la resistencia de la pluma y minimiza su peso, lo que la hace ideal para grúas torre y sobre orugas. Permanecen en una longitud fija, pero pueden girar, inclinarse y moverse de lado a lado al mover una carga.
Por otro lado, las plumas de las grúas hidráulicas pueden extenderse a diferentes longitudes y retraerse para el transporte. Casi siempre tienen una apariencia telescópica o parecida a un poste y funcionan con un potente sistema hidráulico que trabaja bombeando fluido hidráulico a cilindros que contienen pistones.
Entonces, ahora ya sabes lo básico para decidir entre qué tipo de pluma debe de tener la grúa que vas a utilizar para tu construcción. En www.espaciosdemaquinaria.com/es/companies?q=gruas encuentra una multitud de opciones de grúas dependiendo de lo que más le favorezca a tu proyecto.